
Bufff esto de tener que estudiar hace que mi mente se disperse con más facilidad, mis ojos están abiertos pero mi cerebro se balancea dulcemente en su hamaca, oculto en los recovecos de mi cráneo...
Un libro en mi mente... “Una mente inquieta” (Kay R. Jamison, una autoridad en los procesos maníaco-depresivos)
Y junto a la hamaca una radio en la cual resuena la siguiente frase:
Todos nos movemos dentro de los límites de nuestro temperamento y vivimos sólo parcialmente según las posibilidades de éste. (Byron)

Las incontables hipomanías, y la manía misma, le han dado a mi vida un tacto diferente para sentir, experimentar y pensar. Incluso en los momentos en que estaba más psicótica –con percepciones engañosas, alucinada y enloquecida- he sido consciente de descubrir en mi cerebro y en mi corazón nuevos aspectos increíbles y encantadores que me dejaron maravillada y me hicieron sentir como si pudiese morir en aquel instante y permanecer sostenida por las imágenes. Algunas de ellas eran grotescas y feas y nunca quise saber que estaban allí o volver a revivirlas, pero siempre encontré nuevos recovecos y, cada vez que vuelvo a mi estado normal, no puedo imaginar que pudiese cansarme de la vida, pues he conocido esos meandros sin término con sus horizontes ilimitados.”
“Una mente inquieta” - Kay R. Jamison
1 comentarios:
la mente...un enredo en el que es fácil caer, fácil enfermar, a veces ni siquiera hay otra opción, difícil es sujetar sus riendas
besazo .^
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